Qué hacer si te estás atragantando y estás solo

En algún momento de nuestras vidas, todos nos hemos enfrentado a un atragantamiento, ya sea propio o presenciado en otra persona. Estas situaciones, que ocurren con frecuencia, suelen estar relacionadas con la ingestión de alimentos o incluso con la propia saliva. Aunque son más comunes en la infancia y la vejez debido a la falta de habilidad o a la mayor dificultad para masticar, nadie está exento de que le pueda suceder.

¿Por qué sucede esto?

Comer rápidamente sin masticar adecuadamente, hablar mientras se come, padecer problemas de salud como enfermedades neurológicas o trastornos del movimiento, o incluso ciertos tipos de alimentos, son los factores más frecuentes que causan atragantamientos. 

¿Qué hacer si esto sucede?

En caso de atragantamiento, es crucial actuar con rapidez, aunque la respuesta adecuada dependerá del objeto o tipo de alimento que esté obstruyendo las vías respiratorias. El atragantamiento suele producirse por algo sólido y la persona puede toser, esa es la mejor manera de expulsarlo. Es fundamental mantener la calma y no interferir en ese momento.

Por otro lado, si el objeto obstructor es líquido, como una sopa o una bebida, recomiendan inclinar la cabeza hacia abajo para facilitar su expulsión. Solo en el caso de que el objeto sea sólido y de un tamaño considerable, se debe intentar extraer con los dedos. Si estos consejos no funcionan, se debe buscar atención médica de emergencia y realizar maniobras de primeros auxilios como la maniobra de Heimlich.

Maniobra de Heimlich:

La maniobra de Heimlich es una técnica de primeros auxilios que permite desobstruir las vías respiratorias. A continuación, se describen los pasos a seguir:

• Colóquese detrás de la persona atragantada y rodee su cintura con los brazos.
• Cierre un puño y colóquelo en la zona entre el tórax y el abdomen, justo debajo del esternón.
• Cubra el puño con su otra mano y presione bruscamente hacia adentro y hacia arriba, comprimiendo a la persona contra su cuerpo, imitando el efecto de la tos.
• Repita estos pasos tantas veces como sea necesario hasta que el objeto obstructor sea expulsado.

Si se encuentra solo y es víctima de un atragantamiento, también puede realizar la maniobra de Heimlich con algunas variaciones:

• En puño debe colocarse debajo de las costillas y por encima del ombligo, con el pulgar orientado hacia adentro.
• Al igual que en el caso anterior, cubra el puño con su otra mano y presione bruscamente hacia adentro y hacia arriba.
• En caso de no contar con la fuerza suficiente, busque apoyo en una mesa, silla o cualquier borde estable para presionar la parte superior de su abdomen.

Sin embargo, no se recomienda utilizar esta técnica en menores de un año, mujeres embarazadas o personas con obesidad. En estos casos, es necesario llamar a los servicios de emergencia. Si la situación es extremadamente urgente, los pasos a seguir en la maniobra de Heimlich son los mismos, pero se coloca el puño en la mitad del esternón en lugar de debajo del mismo.

Si la persona se encuentra inconsciente en el suelo, debe colocarse boca arriba y situarse encima de ella, presionando con las manos justo debajo del esternón en la dirección mencionada anteriormente, utilizando el talón de la mano que se encuentra debajo.

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