Matthew Perry, el icónico actor conocido por su papel de Chandler Bing en la exitosa serie de comedia "Friends", luchó valientemente contra las adicciones mientras enfrentaba la fama y el éxito en la televisión.
Aunque su carrera lo llevó a la cima de la industria del entretenimiento, también lo sumió en una batalla personal contra el alcohol y el Vicodin, un poderoso analgésico.
La serie "Friends" debutó el 22 de septiembre de 1994 y se convirtió en un fenómeno cultural que sigue siendo amada por millones de fanáticos en todo el mundo.
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Perry, quien interpretó a Chandler Bing, era uno de los personajes principales y contribuyó significativamente al atractivo de la serie. Sin embargo, los años en que participó en la serie no estuvieron exentos de desafíos personales.
Matthew Perry enfrentó la presión de la fama y la exposición constante en la industria del entretenimiento. Durante este tiempo, también comenzó a lidiar con adicciones, en particular el alcohol y el Vicodin, un analgésico utilizado para tratar el dolor físico.
En una entrevista con la revista People, Perry compartió su lucha contra estas adicciones mientras estaba en el apogeo de la fama por su papel en "Friends".
El actor reconoció que durante los diez años que duró su participación en "Friends", desde los 24 hasta los 34 años, él y sus compañeros de reparto estuvieron constantemente en el ojo público debido a la popularidad de la serie.
Perry describió cómo comenzó a consumir en exceso el Vicodin y cómo, a pesar de no anticipar que desarrollaría un problema con la sustancia, se sintió atraído por su efecto.
Inicialmente, el analgésico le proporcionaba una sensación de bienestar, pero pronto se dio cuenta de que había caído en una dinámica poco saludable. A pesar de los intentos de apoyo por parte de sus colegas en "Friends", Perry no estaba en un lugar mental para recibir ayuda en ese momento.
Sin embargo, el actor eventualmente reconoció que había tocado fondo. En el inicio de 2001, decidió dar un paso valiente para buscar la ayuda que necesitaba. Llamó a sus padres, quienes intervinieron y lo llevaron a un centro de rehabilitación. Este marcó un punto de inflexión en su vida y su lucha contra las adicciones.
La historia de Matthew Perry es un testimonio de la fortaleza y tras su fallecimiento este sábado 28 de octubre, su testimonio toma fuerza.
A pesar de los desafíos personales que enfrentó, pudo superar sus adicciones y comenzar un camino hacia la recuperación. A lo largo de su vida, continuó con su carrera en el entretenimiento y dejó una huella indeleble en la industria.
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