Tal y como lo establece la ley, cada 1º de enero se produce un ajuste en los montos de las multas por infringir la Ley de Tránsito. Esta modificación se basa en el Índice de Precios al Consumidor interanual, acumulado a junio de cada año.
En este caso, el acumulado es de 1,78%, el cual se aplica a todas las multas por igual, lo que representa un incremento de entre ¢350 y hasta ¢5.448, respecto al monto anterior.
Esto significa que la multa más baja pasará de ¢21.992,68 a unos ¢22.383,18, y se aplica por no respetar los estacionamientos preferenciales o que se viaje con menos placas de las permitidas, además de no respetar la restricción vehicular por número de placa en San José.
En el caso de la multa de mayor, pasará de ¢306.850,21 a ¢312.298,73, y esta la deberán cancelar quienes conduzcan bajo los efectos del alcohol, a más de 120 km/h o por girar en U en una zona prohibida.
Tome en cuenta que si usted la pagó el marchamo 2018 pero no ha pegado la calcomanía, también se expone a una multa de ¢50,000. A la fecha, más de 300 mil conductores no lo han pagado.
Con el dinero de las multas, el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) utiliza estos recursos en equipamiento para la Policía de Tránsito, en campañas de seguridad vial y en medidas para mejorar la seguridad en carreteras, como demarcaciones o puentes peatonales.
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