SAN JOSÉ.- José Alberto Rojas trabajaba como recolector de basura en Zarcero.
Una una mañana lluviosa de mayo, estaba realizando sus labores, cuando de repente resbaló y cayó debajo del camión de basura que lo aplastó de la cadera hacia abajo. En el hospital le dieron menos de 20% de probabilidades de sobrevivir, pero no se dejó vencer.
"Dios da una cruz a quien la pueda carga. Siempre he tratado de ver las cosas de la mejor manera y esto ha sido lo mejor posible que lo he intentando hacer", aseguró en exclusiva para Noticias Telediario.
Agregó que "me vine para Grecia porque tengo muchas cicatrices, tras el accidente. Allá es muy fresco, pero el frío termina invadiendo las heridas y duele mucho".
El incidente se presentó en el 2019.
"No podría rendirme y dejar esto a medias. Ahora lo que me queda es demostrarle a mis hijos que no hay nada imposible y que todo se puede seguir adelante por más duro", mencionó.
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