Tras un juego de infarto que necesitó de tiempos extras, el Real Madrid venció al Chelsea en el marcador global (5-4), a pesar de que, el día de hoy, nunca estuvo por encima en el encuentro.
Real Madrid y Chelsea se enfrentaron en el estadio Santiago Bernabéu por la vuelta de los cuartos de final de la UEFA Champions League, serie que iniciaba con una ventaja de dos anotaciones a favor de los "merengues" conseguida en Stanford Bridge.
El juego de ida parecía que había dejado tintes definitivos, debido a la contundencia y claridad con la que el Real Madrid doblegó al Chelsea en Londres, con un impresionante triplete del francés Karim Benzema, quien hizo historia superando a Puskas y colocarse como el tercer máximo anotador en la historia del club blanco.
Un estadio Santiago Bernabéu repleto y a punto de terminar su remodelación, recibió a ambos equipos. Los dirigidos por Thomas Tuchel tenían una misión única; anotar dos goles y buscar la remontada en casa del equipo más ganador del fútbol europeo.
Inicio demoledor inglés
Los "blues" arrancaron el partido dejando en claro que querían golpear temprano. Con Timo Werner como titular a diferencia del encuentro de ida, los londinenses tuvieron mucho más peso en ofensiva, poniendo en apuros a los madridistas desde las primeras de tanteo.
Esa presión tuvo sus frutos y se vio materializada a los 15 minutos del cotejo, cuando el británico Mason Mount recibió un balón precedido de un espectacular pasabola con asistencia incluida de Werner, y sacó un potente disparo con derecha que venció a Thibaut Courtois y puso el 1-0 momentáneo.
A partir de la anotación de los ingleses, el Real Madrid intentó igualar las acciones por medio de dupla estelar en ofensiva compuesta por Karim Benzema y Vinicius Jr. El Chelsea, ordenado en defensa como es costumbre desde la llegada de Tuchel, resistió los ataques blancos con la categoría que distingue al actual campeón de Europa.
Segunda parte, misma tónica
Apenas habían pasado 6 minutos de la etapa complementaria y la superioridad del Chelsea se iba a notar más que nunca. Luego de un arsenal de ocasiones y un acoso constante al marco defendido por el belga Courtouis, Antonio Rudiger con un certero cabezazo puso tablas en el marcador global.
Los dirigidos por Carlo Ancelotti estaban sufriendo en su cancha, los londinenses eran ampliamente superiores, incluso, le fue anulado un gol a Marcos Alonso por una mano en ataque, que hubiese significado la remontada y clasificación del Chelsea.
Los dirigidos por Carlo Ancelotti estaban sufriendo en su cancha, los londinenses eran ampliamente superiores, incluso, le fue anulado un gol a Marcos Alonso por una mano en ataque, que hubiese significado la remontada y clasificación del Chelsea.
A los 75 minutos el silencio total se apoderó de la "Casa Blanca", ya que con un golazo estratosférico, Timo Werner sacó la marca de dos defensores merengues y vulneró una vez más el marco local. A este momento el partido pintaba como trágico para los 13 veces campeones de Europa.
El Madrid necesitaba la aparición de sus referentes y así, Luka Modric llegó al rescate. Con un pase espectacular a tres dedos, habilitó a Rodrygo Goes, que sin dejar caer el balón sacó un potente disparo con derecha y para ese momento, condenaba la eliminatoria a decidirse en prórroga.
Prórroga de infarto en Madrid
En los tiempos extras, siempre es una historia a parte en estas instancias de Champions. A pesar de que el Real Madrid estaba teniendo su peor partido en la presenta temporada europea, el peso de la camiseta y la aparición de las estrellas marcaron la pauta en el inicio de la prórroga.
Un gran robo de balón de Camavinga, una gran carrera y centro de Vinicius y un gran remate de cabeza del goleador Karim Benzema, puso a los blancos por encima en el marcador global. El tanto del francés pusieron momentáneamente al Madrid en semifinales de la Champions.
Los tiempos suplementarios transcurrieron sin mucha emoción, debido a que el Real Madrid se centró en sostener y defender la ventaja que habían conseguido con la anotación del galo a los 96 minutos de juego.
Finalmente y tras unos últimos minutos de infarto, el conjunto blanco venció al conjunto de Stanford Bridge con un global de 5-4. Ahora, el cuadro de Ancelotti esperará a su rival, que saldrá del ganador de la serie entre el Manchester City y el Atlético de Madrid.
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