El papa Francisco ha vuelto a ser centro de controversia al utilizar un término despectivo para referirse a las personas homosexuales, a quienes aconsejó buscar ayuda psicológica.
Este incidente se produce pocas semanas después de que el pontífice argentino generara un escándalo por sus declaraciones, consideradas homofóbicas.
Durante un encuentro privado con 200 sacerdotes en la Universidad Pontificia Salesiana de Roma, el martes 11 de junio, el papa de 87 años fue interrogado sobre las vocaciones y nuevamente empleó el polémico término ‘frociaggine’.
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Esta palabra del dialecto romano, que se deriva de ‘frocio’, un término despectivo que equivale a ‘maricón’, resulta difícil de traducir con precisión, pero su connotación negativa es innegable.
"En el Vaticano, hay un ambiente de 'frociaggine'", declaró el papa, según la agencia de prensa italiana Ansa.
Esta declaración ha generado una considerable controversia, pues no es la primera vez que el papa utiliza este tipo de lenguaje al referirse a la comunidad homosexual.
El papa Francisco también afirmó que las personas homosexuales deben buscar orientación psicológica.
Según él, aunque los homosexuales son "buenos chicos" y buscan al Señor, necesitan dirección si desean ser sacerdotes. Por ello, recomendó que acudan a un psicólogo en lugar de ser aceptados de inmediato en los seminarios.
“Es mejor orientarlos hacia un buen padre espiritual, hacia un psicólogo", comentó el papa argentino, de acuerdo con el diario italiano Corriere della Sera.
No obstante, la Santa Sede emitió un comunicado señalando que el papa "habló del peligro de las ideologías en la Iglesia y retomó el tema de la admisión en los seminarios de personas con tendencias homosexuales, reiterando la necesidad de acogerlas y acompañarlas en la Iglesia".
El uso del término despectivo por parte del papa Francisco ya había causado polémica a finales de mayo.
En esa ocasión, el pontífice se disculpó por haber utilizado la palabra ‘frociaggine’ durante un encuentro a puerta cerrada con obispos italianos. El Vaticano afirmó entonces que el papa nunca tuvo la intención de "ofender o expresarse en términos homofóbicos".
¿Cuál fue la reacción internacional?
Estas declaraciones han desatado una polémica global, provocando la indignación y decepción de las asociaciones que defienden los derechos de la comunidad LGTBI+.
El papa Francisco también ha sido crítico con la supuesta "ideología de género", a la que considera peligrosa.
“Es muy importante que haya este encuentro entre hombres y mujeres, porque hoy el peligro más feo es la ideología de género, que anula las diferencias”, explicó el pontífice.
Según él, cancelar las diferencias entre un hombre y una mujer es equivalente a cancelar a la humanidad.
“Pedí estudios sobre esta fea ideología de nuestro tiempo, que cancela las diferencias y hace que todo sea igual; cancelar la diferencia es cancelar la humanidad. El hombre y la mujer, y viceversa, están en una fecunda tensión”, agregó.
La postura del papa Francisco ha generado un debate significativo tanto dentro como fuera de la Iglesia.
Sus palabras y recomendaciones, percibidas como controvertidas y a veces contradictorias, reflejan la compleja relación de la Iglesia Católica con la comunidad LGTBI+ y los desafíos que enfrenta en un mundo cada vez más diverso y plural.
Mientras algunos aplauden su franqueza y disposición a abordar temas difíciles, otros critican su lenguaje y enfoque, considerándolos perjudiciales y desactualizados.
Este debate continuo subraya la necesidad de un diálogo más profundo y respetuoso sobre estos temas dentro de la Iglesia y la sociedad en general.
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