Siete reclusos de una prisión de Carolina del Sur murieron apuñalados y otros 17 resultaron heridos durante una revuelta de ocho horas que se convirtió en la más letal que vive Estados Unidos desde 1993, según funcionarios estatales.
Se trató de la revuelta carcelaria más letal que vive Estados Unidos desde 1993, cuando nueve presos y un oficial de prisiones murieron en la Instalación Correccional del Sur de Ohio en Lucasville, afirmó Steve Martin, un veterano experto en cárceles y supervisor federal en la actualidad.
Las siete muertes fueron resultado de heridas por apuñalamiento, mencionó el forense del condado de Lee, Larry Logan. "En la cárcel no es que uno tenga pistolas o vaya a ser atropellada", dijo en una entrevista telefónica.
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La prisión tiene 1.583 internos, según su sitio web. Todos los trabajadores y funcionarios de seguridad estaban a salvo y localizados, indicó el departamento en Twitter, sin aportar más detalles.
La población carcelaria de Carolina del Sur cayó cerca de un 15% desde 2010 hasta mediados de 2017, hasta los 20.105 reclusos, con una subutilización de camas en todo el estado, indicó un reporte oficial de departamento para 2017.
El estado tiene unos 5.000 empleados de prisiones en 22 instituciones, pero "la cifra de personal de seguridad sigue estando por debajo de la fuerza necesitada", señaló.
Martin dijo que esta escasez de personal podría haber contribuido al incidente. "Cuando los reclusos de alta seguridad comienzan a enfrentarse entre ellos y no hay personal suficiente, es difícil pararlo", comentó en una entrevista telefónica.
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