Uno de los estudios más recientes entorno a la enfermedad del coronavirus es el de la leucoencefalopatía diseminada, padecimiento que se ha asociado al virus como consecuencia poco común y que llega a representar una consideración diferencial importante.
Dicha investigación fue presidida por Colbey Freeman de la Universidad de Pensilvania, y ahí se indica que entre los efectos que tiene la infección por coronavirus en el órgano rector del cuerpo también están los infarto, la encefalopatía necrotizante, microhemorragia, encefalomielitis aguda diseminada y leucoencefalopatía.
El equipo de expertos estudió a dos mil 820 pacientes con coronavirus que ingresaron al centro hospitalario.
Cabe mencionar que el cerebro es uno de los órganos que más ha preocupado en las investigaciones, pues los trabajos recientes arrojan que es en esta parte del cuerpo que el coronavirus se puede “esconder” y provocar reinfecciones.
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