Quién es la madre detenida por abandonar a su bebé en Nicoya

La joven madre será procesada por el delito de abandono de incapaz.

    Foto: Ministerio de Seguridad Pública (MSP).
Costa Rica /

Una mujer de apellidos Membreño Fernández de 19 años fue detenida como sospechosa de abandonar a un bebé en una casa abandonada en Nicoya, cerca de Playa Garza en la provincia de Guanacaste.

La detención se realizó el martes 11 de junio a las 4:10 pm, la sospechosa ahora se encuentra a disposición del Ministerio Público, donde se le tomará la declaración indagatoria. 

Posteriormente, las autoridades valorarán la solicitud de medidas cautelares para determinar los próximos pasos en el proceso legal.

La investigación inició el sábado 8 de junio, cuando las autoridades encontraron al recién nacido abandonado en la propiedad deshabitada. El infante fue hallado en una pila del lugar, en condiciones que indicaban un evidente abandono.

¿Qué pasó con el bebé abandonado?

El menor de edad fue trasladado en condición crítica al hospital La Anexión en Nicoya, donde recibió la atención médica necesaria. Gracias a los esfuerzos del personal hospitalario, el bebé logró estabilizarse y actualmente se encuentra bajo la protección del PANI.

El Departamento de Atención y Respuesta Inmediata del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) de la Región Chorotega coordinó con el hospital La Anexión y otras autoridades tan pronto fueron notificados del caso el sábado pasado.

Ese mismo día, el PANI localizó al hermano del bebé, un niño de un año y tres meses, en una casa comunal o en acogimiento familiar autorizado por el PANI en la zona. Ahora, ambos hermanos están juntos.

El recién nacido fue dado de alta del centro médico ayer, martes 11 de junio, y quedó bajo una medida de protección en un albergue temporal. Según informó el PANI, ambos niños están en buen estado de salud.

¿Cuál es la situación de los dos hermanos?

Se evaluará detenidamente si existen recursos familiares que puedan hacerse cargo de los menores, para lo cual se considerarán todas las opciones de familiares cercanos que puedan proporcionar un entorno seguro y estable.

Inicialmente, se dictará una medida cautelar de un mes, la cual podrá ser prorrogada hasta por seis meses adicionales si así se dispone en una audiencia previa.

Una vez establecida la medida cautelar, el caso se llevará a la vía judicial. En este proceso, las autoridades competentes examinarán todas las circunstancias del caso y tomarán una decisión informada sobre las medidas de protección definitivas que se deben implementar.

Estas medidas pueden incluir el cuidado provisional de los menores en familias idóneas, que hayan sido evaluadas y aprobadas para proporcionarles un hogar seguro.

Si no se encuentran familiares adecuados o disponibles, otra opción es el abrigo temporal en un albergue, donde los niños recibirán atención y cuidados en un entorno supervisado.

Además, también se considera la posibilidad de que alguna organización no gubernamental (ONG) se encargue del cuidado de los menores.


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