Padre de hermanos asesinados en Alajuelita brinda declaraciones

El pasado sábado 6 de julio, un crimen violento sacudió profundamente la comunidad de Alajuelita, en San José.

Dos hombres en motocicleta llegaron al bar La Cima y, sin mediar palabra, abrieron fuego contra dos jóvenes: Gersan Nicola Vargas Rodríguez, de 22 años, y su hermano mayor, Pavel Jordany Vargas Rodríguez, de 25 años.

Ambos eran hijos del reconocido músico Eduardo Vargas Quesada, vocalista del famoso grupo de rock Los Vargas Brothers, una banda con más de 50 años de trayectoria en el ámbito musical costarricense.

El músico Eduardo Vargas conversó con Alerta 8 la tarde de este lunes y relató los momentos de dolor que ha vivido desde el ataque.

Contó que la madre de sus hijos asistió a las honras fúnebres y luego regresó al hospital.

“Según me di cuenta la mamá de mis hijos está estable, la devolvieron al hospital después de las honras fúnebres, con ella todo bien”, comentó.

Vargas también mencionó haber visto el video del asesinato de sus hijos, describiendo cómo murieron de manera valiente y, en el caso de su hijo menor, defendiendo a su hermano.

“Darle gracias a todo Costa Rica porque la solidaridad ha sido excelente, no había visto ese video y es un impacto tremendo. La valentía de mi otro hijo, levantarse a defender a su hermano, no murieron como pendejos, murieron como hombres”, aseveró con voz quebrada.

El músico relató que sus hijos siempre hablaban de la posibilidad de morir y, en ese caso, de dar la vida por el otro. Don Eduardo calificó el ataque como cobarde y se mostró visiblemente conmocionado por el incidente que le arrebató a sus retoños.

“Algunas veces los escuché decir que si alguno moría, el otro moriría con él. No murieron dos pendejos, murieron dos hombres y murieron a manos de cobardes”, rememoró con tristeza y rabia contenida.

¿Qué mensaje envió Eduardo Vargas a los jueces del país?

Acto seguido, hizo un llamado a los jueces de la República para que impongan mano dura y eviten dejar libres a criminales.

“Señores jueces, con todo respeto y con todo mi derecho les digo esto, autoridades y cuerpos policiales mis respetos, pero los jueces no sé si están haciendo bien su trabajo. ¿Cuántos padres tienen que ver sufrir todavía? Estamos perdiendo a los jóvenes, la gente sale a matar como si fuera a cazar”, concluyó con vehemencia.

Eduardo Vargas también aprovechó para recordar la importancia de la unión y el apoyo en tiempos de tragedia.

Agradeció las muestras de solidaridad de la comunidad y de todo el país, expresando que en estos momentos difíciles, el apoyo recibido ha sido un consuelo.

La comunidad de Alajuelita, consternada por la ola de violencia que los azota, ha mostrado su apoyo a la familia Vargas.

Las autoridades continúan investigando el caso, buscando a los responsables de este trágico incidente. Mientras tanto, la familia Vargas lucha por encontrar consuelo y justicia en medio de su dolor.

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