Una mezcla deliciosa para muchos y que disfraza una peligrosa realidad para la salud de las personas.
Según el Instituto de Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), los jóvenes entre 15 y 23 años que mezclan el alcohol con bebidas energéticas consumen hasta seis bebidas demás por cada actividad a la que asisten.
Los riesgos para la salud de las personas aumentan cuando se realizan estas mezclas que suelen contener aditivos como cafeína y azúcares.
- Energizantes disfrazan los efectos depresivos del alcohol al mezclarlos
- En Alerta
Los energizantes esconden el efecto depresivo del alcohol, por lo que las personas sienten que pueden tomar más. En realidad, están más afectados que los demás.
Infartos, convulsiones y presión alta son las consecuencias del consumo excesivo de energizantes.
Los bebedores que realizan este tipo de mezclas son más propensos a tener relaciones sexuales no deseadas y a sufrir de intoxicaciones.
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