Con una propuesta arrolladora, el español Rafael Nadal certificó este viernes su presencia en la ronda de octavos de final del Abierto de Australia al derrotar al bosnio Damir Dzumhur, por 6-1, 6-3 y 6-1.
En ese marcador se sintetizan la solidez y la confianza del mallorquín, quien mantiene un nivel intachable en Melbourne Park.
Rafael Nadal anuló en su estreno al dominicano Víctor Estrella Burgos (6-1, 6-1 y 6-1); en segunda ronda apeó al argentino Leonardo Mayer, por 6-3, 6-4 y 7-6 (4); y, ya en la tercera, aniquiló al bosnio Damir Dzumhur.
"Ha sido un gran partido, por supuesto. Cuando ganas 6-1, 6-3 y 6-1 en una tercera ronda es un buen resultado, ¿no?", valoró a pie de pista. "Sin jugar bien es imposible tener ese tipo de resultados, así que estoy feliz por eso", afirmó.
Satisfecho por su juego, el número uno del mundo apuntó con prudencia a su siguiente compromiso. En la antesala de los cuartos de final se topará con el argentino Diego Schwartzman.
"Es un jugador que tiene todos los golpes, un gran control desde el fondo de la pista y no falla mucho. Además, es capaz de cambiar de dirección de manera sencilla", analizó. "Sé que será un partido duro, necesitaré jugar a mi mejor nivel", abundó Nadal.
Los tres partidos precedentes los saldó con un favorable 3-0. Nadal le sometió en el torneo de Acapulco en 2013, en el Abierto de Estados Unidos en 2015 y, más recientemente, en 2017, en los cuartos de final del Masters 1000 de Montecarlo, donde el balear triunfó.
Pese a este bagaje y no haber concedido ni un solo set ante Diego Schwartzman, 'Rafa' se mostró cauteloso porque en este punto del certamen crecerá la dificultad. Su próximo oponente es ya uno de los favoritos: el número 24.
Precisamente, a excepción del duelo entre el italiano Andreas Seppi y el británico Kyle Edmund, los octavos de final enfrentarán por la parte más alta del cuadro a cabezas de serie.
El búlgaro Grigor Dimitrov (3) se medirá con el australiano Nick Kyrgios (17) mientras que el español Pablo Carreño (10) se cruzará con el croata Marin Cilic (6).
En el cuadro femenino, por su parte, la danesa Caroline Wozniacki supo contrarrestar el ímpetu de la holandesa Kiki Bertens. La segunda favorita venció por 6-4 y 6-3 para garantizar su pase a octavos. La eslovaca Magdalena Rybarikova será su próxima oponente.
Un emparejamiento apriori accesible le espera asimismo a la ucraniana Elina Svitolina, cuarta preclasificada. Este viernes batió a su compatriota, la joven de 15 años y gran sensación del torneo, Marta Kostyuk, por un doble 6-2, para reunirse en la cuarta ronda con la checa Denisa Allertova.
La sorpresa de la jornada la protagonizó la estonia Anett Kontaveit, con su triunfo (6-3, 1-6 y 6-3) ante la joven letona Jelena Ostapenko, vigente campeona de Roland Garros.
Tras esta gesta, Anett Kontaveit buscará tener continuidad ante la española Carla Suárez, verdugo de la también estonia Kaia Kanepi (3-6, 6-1 y 6-3).
Una nueva victoria permitiría a Carla igualar su mejor actuación en Melbourne. Alcanzó los cuartos de final en dos ocasiones, en 2009 y 2016.
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