"Se nos informa, al ser las catorce horas, de una situación de ahorcamiento y maltrato de un perro (...). Procedemos a trasladarnos para verificar y ver en qué se podía ayudar. Al llegar a la vivienda, esta está cerrada, salen los vecinos y nos indican lo que pasó y nos pasan videos, fotos y nos orientan a entrar para que podamos ver el perrito desde sus viviendas y observar como quedó guindado y nos contaron la agonía que sufrió."
De esa forma, una mujer identificada como Kathya Aguilar, compartió en sus redes sociales la denuncia de un aparente caso de maltrato animal de un perro que apareció ahorcado con su correa, en las afueras de una casa en Rincón Herrera, Calle La Unión, en El Roble de Alajuela.
La denuncia fue interpuesta por vecinos que comunicaron la situación a rescatistas de animales, quienes procedieron a comunicarse con las autoridades para manejar la situación.
Según Aguilar, la denuncia se realizó días atrás a Senasa, pues los vecinos aseguran que han escuchado a los animales ( tienen tres perros, dos de los cuales se encuentran vivos) lamentarse al ser golpeados y amarrados como castigo, por sus dueños.
Pese a estas declaraciones, Aguilar mencionó que “el fiscal dijo que no era delito, que dejaran la escena y que el incidente correspondía a Senasa (Servicio Nacional de Salud Animal).”
Más tarde, Senasa respondió que el caso sí era maltrato animal, y que por ser un delito, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) realizaría la intervención.
Ahora se procederá a realizar una investigación, ya que las condiciones en que se halló el can podrían considerarse como un delito, tras la puesta en marcha de la recién aprobada Ley de Bienestar Animal.
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